Se cumplen hoy 38 años desde que el ejército portugués, apoyado por el pueblo en masa, se alzó en armas contra la dictadura fascista y neocolonialista de Salazar, que gobernaba el país desde 1924 en el más longevo de los regímenes autocráticos europeos. Sin disparar un solo tiro, la rabia y el odio del pueblo portugués estallaron aquella mañana del 25 de abril de 1974 gracias a la intervención del valiente ejército de Portugal que, en un ejercicio de civismo y madurez, derrocó a Salazar para traer la democracia a su país.
Sin embargo, 38 años más tarde, el espíritu y los valores de aquel 25 de abril están por desgracia olvidados y perdidos, como los propios capitanes protagonistas de aquella Revolución se han encargado de recordar al rechazar la invitación a la conmemoración oficial en el Parlamento portugués. Hoy, 38 años más tarde, el pueblo portugués sufre una nueva dictadura, la de los mercados, cuyas armas son aún más dolorosas que los fusiles de Salazar. Por eso, frente a recortes, rescates, ataques, policías y demás instrumentos de represión de la clase burguesa sobre la trabajadora, nosotros y nosotras, como comunistas, estaremos del lado del pueblo de Portugal el día en que decida retomar la senda de aquel 25 de abril y traer una verdadera democracia por y para el pueblo.
¡¡Larga vida al espíritu del 25 de abril!!
¡¡38 años más tarde, la lucha revolucionaria sigue siendo el único camino!!
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